La Audiencia juzga en abril al falso médico de Vinaròs 8 años después

06-11-2017 -
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El impostor decía a sus pacientes que tenían o podían tener cáncer para lucrarse. El fiscal lo acusa de lesiones, estafa, delito contra la salud pública y pide 22 años para él

Ocho años han tenido que esperar las víctimas del falso médico que ejerció en Vinaròs José Manuel López Pérez --conocido como Coté-- para ver sentado en el banquillo al hombre que, presuntamente, los estafó, realizó diagnósticos falaces y los trató sin tener titulación médica. La Audiencia Provincial acogerá el juicio contra él en abril durante cinco jornadas --los días 10, 11, 13, 17 y 18--, según informó ayer la Asociación de Afectados de Intrusismo Médico-Sanitario.

Coté, para quien la Fiscalía pide 22 años y medio de cárcel por los delitos de intrusismo, lesiones y contra la salud pública, no estará solo en el banquillo. Le acompañarán su mujer, quien se enfrenta a ocho años y cinco meses; su socio vinarocense, Frederic Gisbert, para quien el Ministerio Público pide también 22 años y medio; y Elena Epifantseva, una médico, supuestamente, compinchada con los otros tres acusados --a quienes dejaba su sello profesional-- y que se enfrenta a otros ocho años y cinco meses.

El juicio se ha retrasado, según la asociación, por los continuos recursos de la defensa, las pruebas complementarias solicitadas por la Fiscalía y el tiempo en el que Epifantseva estuvo en búsqueda y captura. «Nos llena de asombro y de tristeza que contemos con la fecha del juicio por su segunda detención, en Castellón, y no tengamos, en cambio, juicio por la primera causa abierta contra él en Ferrol», incide la presidenta, Esther Fontán, que recuerda que las víctimas en Galicia son cerca de un centenar.

Según el escrito de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Mediterráneo, Frederic Gisbert montó en el año 2006 una clínica sin contar con titulación. Dos años después, contactó con José Manuel López Pérez, que, careciendo de cualquier título homologado, se trasladó de Galicia a Vinaròs para sumarse a la presunta estafa. En Esthetical Medical Center ofrecían asistencia odontológica, estomatológica y estética.

En dicho negocio ilegal llegaron a realizar extracciones de sangre, intervenciones quirúrgicas, autotransfusiones, careciendo el centro de las condiciones necesarias. Los procesados dieron diagnósticos falaces a sus clientes, informándoles de que ellos o sus hijos menores tenían cáncer o enfermedades degenerativas.

Gisbert presentaba a López como un «eminente neurólogo», exhibiendo a los pacientes varios títulos. En su local utilizaron, según el fiscal, productos no autorizados por la Agencia Española del Medicamento, así como otros caducados, según relata la Fiscalía Provincial.

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